Jeremías 1:19 dice: Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte.
Esta es la promesa que Dios nos hace para que no bajemos los brazos, porque Él tiene algo mejor a la vuelta de la esquina. Puede que no sea hoy, puede que la respuesta se haga esperar, pero lo que si puede suceder es que Él lo va concretar en su tiempo. Nuestro Padre celestial desea librarnos, eso dice su promesa. Podemos tener un mal recuerdo que nos dejó una herida, pero el que nos creó tiene un propósito. Usarnos para edificar otras vidas.
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